
El QuindÃo " patrimonio cultural de la humanidad "
El departamento del QuindÃo es el más pequeño del territorio continental del paÃs, con una superficie de 1.845 km2. Se destaca en el paÃs por el fuerte arraigo de la cultura cafetera y por su riqueza natural, representada en una exuberante vegetación y gran diversidad de ecosistemas.
Un par de datos demuestran la importancia del café en esta región: la totalidad de los 12 municipios del QuindÃo son productores de café, y 207 de sus 267 veredas son cafeteras. El departamento es el doceavo productor de café del paÃs (de una totalidad de 20), con una producción anual estimada de 666.000 sacos de 60 kilogramos de café verde o, en otras palabras, el 6 % de la cosecha colombiana. Esta actividad juega un papel fundamental en la economÃa rural del departamento, con una participación del 34 % en su PIB agrÃcola.
El QuindÃo cuenta con aproximadamente con 5.655 caficultores, 31.074 hectáreas sembradas en café y 6.547 fincas cafeteras, de las cuales hay 5.900 ubicadas en el área de influencia del PCC. De estas, cerca de 3.650 se localizan en el área principal y cuentan con una extensión sembrada en café de 11.200 hectáreas, lo que representa el 39 % del área rural del PCC en el departamento. El área restante se distribuye en otros productos agrÃcolas, como cacao, frÃjol, maÃz, plátano, sorgo, soya y yuca. Igualmente, la ganaderÃa ocupa un lugar destacado en la economÃa regional, con actividades de crÃa, levante y engorde de ganados caprino, ovino, porcino y vacuno.
Tal como es caracterÃstico en la totalidad del PCC, las zonas ubicadas en el QuindÃo se destacan por la combinación de la tradición manual del cultivo, con la introducción de técnicas de producción innovadoras que han aumentado la competitividad de la actividad. AsÃ, algo más del 74 % de su caficultura es tecnificada. Estos cafetales están plantados siguiendo un patrón ordenado de trazo y en altas densidades, lo que redunda en una mayor capacidad de producción, en promedio superior a las once cargas de café pergamino seco por hectárea al año. El 26 % restante se encuentra sembrado bajo lo que se conoce como sistema de producción tradicional. Este se caracteriza por la ausencia de patrones de siembra, bajas densidades de cultivo (menos de 2.000 plantas por hectárea), edades avanzadas (más de 12 años) y la utilización de variedades de porte alto. Las caracterÃsticas de este sistema de cultivo se derivan en una productividad promedio inferior a las cuatro cargas de café pergamino seco por hectárea, nivel aún bajo para los retos que debe enfrentar el productor para la satisfacción de sus necesidades básicas.
